El peeling facial es una técnica de exfoliación, que ayuda a la eliminación de las manchas, las marcas y las pequeñas arrugas, este contribuye a tener una piel más joven, hidratada, suave y luminosa. El peeling facial es uno de los tratamientos estéticos más demandados, por ser rápidos y tener buenos resultados.
La técnica de este tratamiento consiste en una exfoliación o descamación, en la que se aplica una sustancia sobre la piel para eliminar las células muertas, renovando así las capas superficiales de la piel para mejorar su apariencia.
El peeling es el tratamiento ideal para eliminar las manchas en la piel, causadas por el sol, el acné o los problemas hormonales, siendo también muy eficaz para combatir las primeras arrugas, mejorar el tono y la textura de la piel, aportándole luminosidad. Además, el peeling tiene otros beneficios para la piel, este estimula la creación de colágeno, activa la circulación de la piel y mejora la absorción de otros productos de belleza, resultando muy eficaz para reducir los poros.
El número de sesiones de este tratamiento varía según la patología (manchas, cicatrices, arrugas), el tipo de peeling y las características individuales de cada paciente. Entre sesión y sesión se suele dejar un tiempo prudente de una semana, mínimo, para que la piel se recupere. Las sesiones suelen durar alrededor de 30 minutos.
Después del tratamiento se aconseja utilizar una crema reparadora, cicatrizante, calmante y de protección solar máxima, además de evitar de manera absoluta la exposición solar.
Durante los primeros días la piel estará enrojecida y a medida que pasen los días, se irá escamando, dejando paso a una piel nueva, más suave e hidratada, sin manchas o marcas, y más luminosa.
Los efectos del peeling facial son bastante duraderos, aunque se recomiendan sesiones de recuerdo, sobre todo, si el objetivo ha sido el de reducir las arrugas.
Hoy en Advanced Esthetic los queremos invitar a que pregunten no sólo por el peeling facial convencional, sino también por nuestro peeling de evento, una técnica más liviana que se puede realizar horas o días antes de un evento, permitiéndote lucir una piel humectada y luminosa al instante.